martes, 19 de diciembre de 2006

viernes, 15 de diciembre de 2006

PUBLICACIONES DE SPIN CERO

El "Grupo de Trabajo Spin Cero" inició su andadura en el terreno de las publicaciones escolares, la divulgación científica y el diseño y construcción de módulos interactivos; su nombre inicial fue "G.T. Apoyo Experimental en Ciencias". Con el transcurso del tiempo pudimos comprobar que nuestras actividades se conocían más por Spin Cero (nombre de nuestra revista) que por Apoyo Experimental (el cual nos pareció al principio más de acuerdo a nuestras actividades e inquietudes) y decidimos cambiarlo.
Nuestras publicaciones se pueden resumir en tres apartados: A) revista Spin Cero, B) libros de historia de la ciencia y C) elaboración de carteles conmemorativos.
A) La revista cuenta actualmente con diez números publicados y otro extraordinario (un monográfico sobre el centenario de la relatividad). Salvo el nº 3, todos ellos los podemos encontrar en internet. El enorme número de artículos aparecidos en los diez números de la revista hacen que ésta se encuentre en numerosas bases de datos, por lo que es muy fácil encontrarla en la red.
B) En cuanto a los libros de historia de la ciencia tenemos:
1) EL SIGLO DE LAVOISIER (de 48 pág.) publicado por el I.C.E. de la Universidad de Málaga en 1995 con motivo de la conmemoración del segundo centenario de la muerte de Lavoisier.
2) CIENCIA Y SOCIEDAD EN EL SIGLO XIX (de 295 pág). Publicado por el CEP de Málaga en 1997. Contiene aspectos muy interesantes sobre cómo se desarrollaron las distintas ciencias durante el siglo XIX.
3) CIENCIA Y SOCIEDAD EN EL SIGLO XVIII (de 259 pág.) con el que cubrimos las aportaciones más relevantes de las ciencias durante el Siglo de las Luces.
Estas tres publicaciones tienen en común arrancar de una introducción, más o menos desarrollada y extensa para acabar con la presentación de unos carteles conmemorativos que constituyen nuestra cartelería particular, la cual la recogemos en el punto siguiente. Los dos últimos libros mencionados se pueden encontrar en el CEP de Málaga.
C) La primera cartelería que hicimos es EL SIGLO DE LAVOISIER que consta de 24 carteles en tamaño de cartulina en los que se recogen de modo sucinto los aportaciones más importantes del siglo XVIII. Está enmcarcada y depositada en erl IES Pablo Picasso a disposición de cualquier centro que la solicite. Esta cartelería es el origen del librito del mismo nombre.
La segunda cartelería corresponde a la ciencia del siglio XIX. Es más extensa que la anterior (consta de un número doble de carteles) pero están elaborados en tamaño A2 y sólo plastificados por falta de medios. Unos pocos de ellos que se hicieron a parte para conmemorar las contribuciones científicas en torno a la Generación del 98, están enmarcados.
Finalmente, la joya en cartelería es la que corresponde a la conmemoración del centenario de la teoría de la relatividad. Consta de 62 carteles que, en tres grupos, recogen los aspectos más destacados de la vida, la obra y los viajes de Einstein. No están enmarcados pero su soporte en cartón pluma permite su exposición.

jueves, 7 de diciembre de 2006

G.T. SPIN CERO

Los Centros de Profesores ofrecen ciertas posibilidades para aquellos que quieran trabajar en un proyecto determinado. Como ejemplos voy a poner dos: el primero es el Proyecto de Innovación Educativa que se inició durante el Curso 93/94 con la finalidad de generar recursos, humanos y económicos, para promocionar la celebración de una exposición interactiva de módulos de ciencia, con la finalidad de originar la creación de un museo escolar de ciencia en Málaga (MECYT). En dicho proyecto estuvimos inscritos más de setenta profesores de toda la provincia, trabajando codo con codo. Entre todos llevamos a cabo la exposición interactiva de abril y mayo de 1994 en la Sede Social del Parque Tecnológico de Málaga, con más de cien módulos diseñados y construidos por profesores y alumnos y con una asistencia de más de 10400 alumnos de toda Andalucía. Fruto de esta singular exposición fue el Centro de Ciencias PRINCIPIA.
El segundo de los proyectos es el grupo de trabajo Spin Cero, anteriormente conocido como Apoyo Experimental en Ciencias, cuya finalidad principal fue la publicación de una revista de divulgación científica en el ámbito escolar. Con esta segunda idea, creí entonces que lograríamos cubrir completamente las dos posibles actividades que terminarían por potenciar la creación del museo: la exposición y la divulgación de la ciencia. Además, cada una reforzaría y apoyaría a la otra en beneficio de ambas.
La idea no terminó de cuajar y hubo que seguir con cada proyecto de manera independiente. Más adelante nació el grupo de trabajo SPIN CERO cuyos objetivos los resumimos en los siguientes puntos:
1) Determinación y recopilación de dificultades conceptuales dentro de cada tema, mediante sencillas pruebas orales y escritas, con el propósito de poder contribuir al desarrollo de los Diseños Curriculares del nuevo sistema educativo.
2) Construcción de material didáctico de apoyo que ayude a comprender los conceptos no asimilados o difíciles de asimilar. Esto permite el desarrollo de técnicas educativas orientadas a favorecer la atención personalizada, y garantiza la participación de alumnos y profesores desde una planteamiento de convivencia y solidaridad.
3) Propiciar el interés por las ciencias mediante la realización de las JORNADAS de FÍSICA Y QUÍMICA.
4) Incentivar el interés por la lectura científica y la divulgación social de la ciencia dentro de la comunidad escolar a través de la publicación de la revista SPIN CERO, CUADERNOS DE CIENCIA.
5) Hacer copias en CD con todos los números publicados de SPIN CERO y distribuirlas por todos los IES de Andalucía.

lunes, 4 de diciembre de 2006

¿QUÉ ES SPIN CERO?

SPIN CERO es una revista escolar de divulgación científica que se distribuye gratuitamente a los IES de Málaga, a los CEPs de Andalucía y a diversas bibliotecas. Nació en el curso 1994/95 con la idea de ofrecer sus páginas a todas aquellas personas interesadas en la divulgación científica y, al mismo tiempo, ser un espacio en el que se pudieran volcar las inquietudes divulgativas de todos los interesados.
SPIN CERO tiene, pues, 11 años y también se han publicado 11 números, entre los que figura uno extraordinario dedicado a Einstein y con el que aportamos nuestra humilde conmemoración del centenario de la publicación de la teoría especial de la relatividad. Salvo el número 3, podemos consultar todos ellos en la dirección que se reseña a continuación:
Y para aquellos autores que deseen colaborar con la revista pueden utilizar la siguiente dirección de correo eléctrónico para enviarnos sus artículos o colaboraciones: spincero@yahoo.es
Hace once años, cuando nació la revista, aún teníamos en nuestro instituto el sistema educativo anterior, conocido por las siglas BUP y COU. Entonces la enseñanza dentro de los institutos no era obligatoria y los alumnos nos llegaban algo cribados. En su conjunto, el sistema se autodefinía como "enseñanza media" y para muchos era el eslabón, hoy perdido, entre la enseñanza primaria y la superior. En definitiva, en algún que otro rincón de los institutos de entonces se respiraba una atmósfera de pequeñas universidades: el alumno asistía porque quería, sin imposiciones de nígún tipo, y se comportaba responsablemente como un adulto. Se podía exigir cierto nivel y, en el proceso de evaluación, se apreciaban resultados académicos que satisfacen a los profesores. Cuando esto no se conseguía, se enviaba a la suficiencia y, si el alumno persistía en su posición, entonces no había más remedio que reducirle las vacaciones de verano convocándolo nuevamente el primer día de septiembre. Como quiera que fuera, el sistema al final funcionaba porque, a base de intentos y de esfuerzos, el alumno terminaba saltando por encima del listón. Pero si en alguna ocasión el listón amenazaba con caerse, siempre había alguien que humanamente evitaba que se diera por nula la prueba. Era el modo de primar el esfuerzo.
Hoy las cosas han cambiado, ahora somos educadores y nuestro sistema se llama "educación secundaria", más conocido por ESO. Hay quien ve aquí una paradoja porque lo de educación no se termina de ver y, cuando se encuentra, parece algo secundario que debería ser lo primero. El hecho es que todo ha cambiado. Y entre otras cosas, no tenemos el tiempo que antes se disponía para la revista.
Publicar un número lleva su tiempo y su esfuerzo. Lo primero que hace falta son artículos suficientes como para elegir la línea editorial que nos gusta (la divulgación científica a todos los niveles). Lo segundo es el presupuesto que requiere cada número pero, ojo, si no tenemos suficientes artículos y colaboraciones, hay que volver atrás y buscar los que faltan para cerrar el número. Ya tenemos los artículos y el presupuesto, muy ajustado, por cierto. Ahora viene la fase de la corrección, de la depuración y de la maquetación. Aquí falta de todo: una ilustración por aquí, sobran otras por allí, este artículo se pasa de páginas, qué orden interesa más, la maquetación se hace interminable, el número de páginas no hay quien lo cierre, etc., etc.
Y luego vienen los problemas con la imprenta. Primero hay que tomar contacto, que no siempre es fácil, y pedir presupuesto. "No se preocupe que se lo envío para la semana que viene". "Recuerde que a primeros de mayo tiene que estar la revista -insisto- para que tengamos tiempo de enviarla a los institutos antes de que acabe el curso, si no no la lee nadie".
Las pruebas de imprenta siempre se retrasan y no parecen acabar nunca, pero finalmente, cuando ya tienes perdida toda esperanza, aparecen las prisas: el nuevo número por fín ha llegado al instituto; ahora es necesario llevarlas cuanto antes al CEP para que las distribuyan y lleguen a los institutos antes de final de mayo. Esto es, grosso modo, el interminable estracto de vicisitudes que rodean a la publicación de un número. En otro momento entraremos en más detalles.